-César Canela-
[Este es el tercer artículo sobre Filosofía del Lenguaje]
![]() |
El lenguaje es fundamental en la vida humana. |
Lenguaje y cultura.
Se sabe desde siempre que “el hombre es un ser social por naturaleza”, frase que arroja en el pensamiento la idea de que el nombre no puede desarrollarse por sí sólo, necesita una cultura y un lenguaje para poder desarrollarse plenamente. Lenguaje y cultura están íntimamente ligados, uno depende del otro para existir, sin palabras el hombre no puede pensar racionalmente.
La cultura es lo que le permite al ser humano construir una sociedad, es decir, definir las condiciones de su voluntad para convivir, los códigos para reconocerse y distinguirse de los demás, así como la manera de organizar sus relaciones con las demás personas.
El lenguaje es un conjunto de códigos y signos (semiótica) para poder transmitir las tradiciones asumidas por la cultura (religiosidad, folklore, etc.) y también para transmitir los elementos propios de la vida diaria. Lenguaje y cultura son dos cosas que están estrechamente relacionadas entre sí. El lenguaje es un elemento de la cultura, que la refleja directamente, pero también el lenguaje contribuye a crear y organizar la cultura.
El origen del lenguaje.
No se sabe con exactitud cuando se originó el lenguaje en el sentido más estricto. Algunos dicen que el lenguaje surgió exactamente con el surgimiento de la humanidad, otros dicen que el lenguaje surgió a través del tiempo al darse las condiciones de la evolución, para poder articular sonidos y hacer señales que trasciendan el entorno. A continuación, algunas teorías sobre los orígenes del lenguaje:
- “La teoría mama. El lenguaje comenzó cuando el hombre empezó a pronunciar sílabas sencillas relacionadas con los objetos más menos importantes de su entorno”.
- La teoría bow-wow. El lenguaje habría comenzado como imitaciones de sonidos naturales – mu, chu-chu, pash, bzz, miau -. Esto se conoce más con el nombre de onomatopeya.
- La teoría pu-pu. El lenguaje habría comenzado con interjecciones, gritos instintivos y emotivos, tales como ¡oh! para indicar sorpresa, o ¡auch! para indicar dolor.
- La teoría ding-dong. Algunas personas, incluyendo al famoso lingüista Max Muller, han planteado que existe una misteriosa correspondencia entre sonidos y significados. Palabras en inglés como small (pequeño), sharp (afilado) y en general cosas que él denomina “altas” (high things), tienden a tener vocales agudas abiertas en muchos idiomas, mientras que palabras como big (grande), round (redondo), en general cosas que él denomina “bajas” (low things) tienden a tener vocales cerradas posteriores. Esto también es conocido como simbolismo del sonido.
- La teoría sing-song. El lingüista danés Jesperson sugirió que el lenguaje habría salido del juego, la risa, arrullos, cortejos, susurros, y expresiones emocionales similares. Incluso sugirió que, contrario a las teorías, tal vez algunas de nuestras primeras palabras fueron de hecho largas y musicales, en vez de gruñidos cortos, como muchos piensan”.
Hay otras tantas teorías sobre el origen del lenguaje que no se han citado. Lo que lleva a volver a plantear al idea que se dijo, “no se sabe con certeza en qué momento exacto inició el lenguaje humano”, pero el punto de partida de la mayoría es a partir de del surgimiento del hombre aproximadamente 6,000 años antes de Cristo.
La filosofía del lenguaje y la vida cotidiana: transparencia y opacidad del lenguaje.
Es poco razonable separar la filosofía del lenguaje de la vida cotidiana porque todas las personas buscan el verdadero sentido del significado, de lo que se le quiere transmitir a través del lenguaje, por ejemplo, cuando una persona le dice a otra “explícate mejor que no entiendo lo que me quieres decir”, lo hace con el fin de captar exactamente lo que se le quiere decir. Cuando se usa la hermenéutica para la interpretación de textos (sagrados o profanos) se usa la filosofía del lenguaje, porque se trata de saber lo que exactamente se quiere transmitir.
A pesar de todo el esfuerzo que hace el hombre para la interpretación del lenguaje, surge un problema, “la transparencia y la opacidad” porque el lenguaje por más claro que sea no dice exactamente lo que se quiere transmitir, por ejemplo, a una persona que no ha visto una aurora boreal por más que se le explique a través del lenguaje no se agota toda la realidad que comprende este fenómeno natural. Partiendo de estas premisas se puede decir que el lenguaje es opaco y transparente; porque lo opaco no muestra realmente lo que es y lo transparente muestra lo que está después de sí.
Se sabe desde siempre que “el hombre es un ser social por naturaleza”, frase que arroja en el pensamiento la idea de que el nombre no puede desarrollarse por sí sólo, necesita una cultura y un lenguaje para poder desarrollarse plenamente. Lenguaje y cultura están íntimamente ligados, uno depende del otro para existir, sin palabras el hombre no puede pensar racionalmente.
La cultura es lo que le permite al ser humano construir una sociedad, es decir, definir las condiciones de su voluntad para convivir, los códigos para reconocerse y distinguirse de los demás, así como la manera de organizar sus relaciones con las demás personas.
El lenguaje es un conjunto de códigos y signos (semiótica) para poder transmitir las tradiciones asumidas por la cultura (religiosidad, folklore, etc.) y también para transmitir los elementos propios de la vida diaria. Lenguaje y cultura son dos cosas que están estrechamente relacionadas entre sí. El lenguaje es un elemento de la cultura, que la refleja directamente, pero también el lenguaje contribuye a crear y organizar la cultura.
El origen del lenguaje.
No se sabe con exactitud cuando se originó el lenguaje en el sentido más estricto. Algunos dicen que el lenguaje surgió exactamente con el surgimiento de la humanidad, otros dicen que el lenguaje surgió a través del tiempo al darse las condiciones de la evolución, para poder articular sonidos y hacer señales que trasciendan el entorno. A continuación, algunas teorías sobre los orígenes del lenguaje:
- “La teoría mama. El lenguaje comenzó cuando el hombre empezó a pronunciar sílabas sencillas relacionadas con los objetos más menos importantes de su entorno”.
- La teoría bow-wow. El lenguaje habría comenzado como imitaciones de sonidos naturales – mu, chu-chu, pash, bzz, miau -. Esto se conoce más con el nombre de onomatopeya.
- La teoría pu-pu. El lenguaje habría comenzado con interjecciones, gritos instintivos y emotivos, tales como ¡oh! para indicar sorpresa, o ¡auch! para indicar dolor.
- La teoría ding-dong. Algunas personas, incluyendo al famoso lingüista Max Muller, han planteado que existe una misteriosa correspondencia entre sonidos y significados. Palabras en inglés como small (pequeño), sharp (afilado) y en general cosas que él denomina “altas” (high things), tienden a tener vocales agudas abiertas en muchos idiomas, mientras que palabras como big (grande), round (redondo), en general cosas que él denomina “bajas” (low things) tienden a tener vocales cerradas posteriores. Esto también es conocido como simbolismo del sonido.
- La teoría sing-song. El lingüista danés Jesperson sugirió que el lenguaje habría salido del juego, la risa, arrullos, cortejos, susurros, y expresiones emocionales similares. Incluso sugirió que, contrario a las teorías, tal vez algunas de nuestras primeras palabras fueron de hecho largas y musicales, en vez de gruñidos cortos, como muchos piensan”.
Hay otras tantas teorías sobre el origen del lenguaje que no se han citado. Lo que lleva a volver a plantear al idea que se dijo, “no se sabe con certeza en qué momento exacto inició el lenguaje humano”, pero el punto de partida de la mayoría es a partir de del surgimiento del hombre aproximadamente 6,000 años antes de Cristo.
La filosofía del lenguaje y la vida cotidiana: transparencia y opacidad del lenguaje.
Es poco razonable separar la filosofía del lenguaje de la vida cotidiana porque todas las personas buscan el verdadero sentido del significado, de lo que se le quiere transmitir a través del lenguaje, por ejemplo, cuando una persona le dice a otra “explícate mejor que no entiendo lo que me quieres decir”, lo hace con el fin de captar exactamente lo que se le quiere decir. Cuando se usa la hermenéutica para la interpretación de textos (sagrados o profanos) se usa la filosofía del lenguaje, porque se trata de saber lo que exactamente se quiere transmitir.
A pesar de todo el esfuerzo que hace el hombre para la interpretación del lenguaje, surge un problema, “la transparencia y la opacidad” porque el lenguaje por más claro que sea no dice exactamente lo que se quiere transmitir, por ejemplo, a una persona que no ha visto una aurora boreal por más que se le explique a través del lenguaje no se agota toda la realidad que comprende este fenómeno natural. Partiendo de estas premisas se puede decir que el lenguaje es opaco y transparente; porque lo opaco no muestra realmente lo que es y lo transparente muestra lo que está después de sí.